Según los expertos, los niveles de calor y humedad que provocaron las inundaciones habrían sido prácticamente imposibles sin la presencia del cambio climático.
El viernes pasado (3/7), la ciudad de Bahía Blanca, en Argentina, rompió el récord de precipitaciones al registrar más de 400 milímetros de lluvia en sólo ocho horas —más del doble del récord anterior, registrado en 1930.
Esta cantidad de lluvia es equivalente a la precipitación total que normalmente ocurriría en el transcurso de un año. Hasta el momento, el municipio ha informado, a través de la red social X, que 16 personas han perdido la vida por los efectos de las inundaciones.